El arte de Magno Bennett no pasa desapercibido en Galápagos. Las réplicas se encuentran en las tiendas, adorna las paredes de hoteles y museos (como el Centro de Interpretación en San Cristóbal). Su producción artística se ha convertido en parte de la identidad de las islas. Imágenes que representan rayos persiguiéndose, bancos de tiburones martillo en las profundidades del océano, su arte siempre parece representar la naturaleza y siempre está lleno de color. «Un artista es su entorno … respira lo que le rodea», explica Magno, y su obra ciertamente parece ser una inmersión en los tonos dramáticos del archipiélago: turquesas centelleantes, azules relucientes, el tinte rojizo del horizonte, el negro escultural del geología de las islas…

Magno no puede recordar un momento de su vida en el que no estuviera pintando. A los siete años ya se ganaba la vida con su arte ya los 19 años abandonó sus sueños de fútbol profesional —era portero “y muy bueno” – para convertirse en un artista de pleno derecho. Galápagos llegó más tarde, una decisión que surgió en parte de su deseo de buscar consuelo en su bulliciosa ciudad natal de Guayaquil, y en parte de la suerte: un concierto temporal en PetroEcuador le obligó a viajar a Santa Cruz para hacer los carteles de la empresa, que en el tiempo, requirió que un artista los reprodujera a mano. Ahora ha pasado más de la mitad de su vida en las islas.

«Un artista es su entorno … respira lo que le rodea»

Su arte retrata la belleza que presencia en Galápagos todos los días, pero también es el resultado de décadas de experimentación para crear sus propios pigmentos, pinturas, lienzos, selladores, etc., desde cero: uno tiene que improvisar todo en lugares remotos como Galápagos. Su obra es también la paciente consumación de su estilo único. El arte de Magno, más allá de sus cualidades estéticas, es un culto al arte en sí mismo, una práctica meditativa íntimamente ligada al entorno, una convicción de que el «arte» nunca es un adorno, sino un instrumento … un conducto de inspiración, una reflexión sobre la condición humana. en el mundo y en cómo nuestro entorno impregna el alma.